A la edad de 19 años, Samuel Stefan, se convirtió en un culto. Pasarían 10 años antes de que pudiera escapar.Usando una técnica llamada "bombardeo de amor", las sectas se aprovechan de los vulnerables, reclutando nuevos miembros con amor y calidez. Después de un período de lavado de cerebro, a los miembros se les prohíbe irse, se les esclaviza mediante el control psicológico y, en el caso de Samuel, incluso a la violencia. Finalmente pudo escapar en la oscuridad de la noche.
A la edad de 19 años, Samuel Stefan, se convirtió en un culto. Pasarían 10 años antes de que pudiera escapar.Usando una técnica llamada "bombardeo de amor", las sectas se aprovechan de los vulnerables, reclutando nuevos miembros con amor y calidez. Después de un período de lavado de cerebro, a los miembros se les prohíbe irse, se les esclaviza mediante el control psicológico y, en el caso de Samuel, incluso a la violencia. Finalmente pudo escapar en la oscuridad de la noche.
A la edad de 19 años, Samuel Stefan, se convirtió en un culto. Pasarían 10 años antes de que pudiera escapar.Usando una técnica llamada "bombardeo de amor", las sectas se aprovechan de los vulnerables, reclutando nuevos miembros con amor y calidez. Después de un período de lavado de cerebro, a los miembros se les prohíbe irse, se les esclaviza mediante el control psicológico y, en el caso de Samuel, incluso a la violencia. Finalmente pudo escapar en la oscuridad de la noche.
Idioma: VOS - En 1977, eran apenas 500. Pensaban llegar a Francia, pero lo que encontraron fue un infierno verde que desbrozaron y cultivaron pacientemente. Actualmente, 60 toneladas de frutas y verduras salen cada semana de Cacao en dirección de los puestos del mercado de Cayena. Los «señores de los pies descalzos» son hoy los horticultores de la Guayana Francesa. Han sabido preservar su identidad, sus costumbres y sus trajes tradicionales.
En la región seca del sur de España, el agua es un bien escaso conocido como “plata líquida”. Los agricultores, científicos y conservacionistas están trabajando con la población local para combinar el conocimiento antiguo adquirido durante siglos con tecnologías de vanguardia para proteger este paisaje natural único.
Los pigmeos Baka son expertos cazadores-recolectores, famosos por cosechar miel de abejas silvestres en el bosque. Las oportunidades para construir nidos naturales allí son tan numerosas que es imposible domesticar la actividad de las abejas en un entorno así. Entonces, el Baka debe emplear una gama altamente desarrollada de habilidades y conocimientos para superar la astucia de las abejas.
En el hogar de los Yaaku en Kenia, los humanos han tenido que adaptarse al ingenio de los muchos ladrones de miel para proteger el néctar y, a veces, incluso asociarse con ciertos depredadores para cosecharlo.
En Etiopía, las abejas son mucho más que un simple símbolo de fertilidad y abundancia. Sirven a la fe en la segunda nación cristiana más antigua del mundo.
